¿Y qué me dices del faisán?

Imagina que ZP la lía tanto que meten la educacion sexual como una asignatura en primaria, con el profesor diciéndole a niños de 11 años: ''pues la tarea para mañana es que os hagáis una paja''. Ufff... aquí donde me ves dejaría de hacer esas manualidades, sí, sólo porque me lo manda el profe, que cuando estas cosas se convierten en obligación pierden la gracia. Aunque lo peor es que la cosa llegara a un punto en que el profesor mandara trabajos, ahí la cosa se pone chunga ya. Imagínate que el profe dice: ''el trabajo que tenéis que hacer es coger una cámara y grabaros haciéndoos una paja y luego me lo mandáis para que lo corrija''. Ufff... fuegote. Un niño de 11 años llegando a su casa feliz diciendo: ''¡mamá, me han puesto un 9 en pajas!'' Es un tema serio esto ya, puede darse que los políticos sociatas se vuelvan tan locos que digan en el Congreso: ''no veo nada extraño en que ese profesor de educación sexual pidiera a sus alumnos que se graben masturbándose y que le envíen los vídeos para que pueda corregirlos luego, es la única forma de que pueda llegar a hacer su trabajo en condiciones y es un ejemplo para todos, quizá se meten con él por ser profesor de un colegio público''. Parece de risa todo esto, pero el PSOE ya se movió para que se prohibieran en los colegios juegos que ellos veían sexistas. Ya han cruzado la frontera de la libertad de los niños de una forma igual de infame y triste que la que imaginamos por aquí.
Por eso tampoco me extrañaría ver por la calle a señores que al cruzarse con un niño así de 6 años, esa edad en la que los niños te llegan por la polla, se la acomodan justo delante suya, como para decir ''aquí va lo bueno, aquí lo llevo, aquí lo guardo yo; el despacho oval, el cofre''. Ese despertar incómodo al sexo y a la política a la vez, bienvenido al mundo adulto. Hacerse mayor de golpe y porrazo, nunca mejor dicho.