Pasa un cuarto de hora y ambos individuos están arrancando sus coches a ambos extremos del parking. Se apresuran por salir de allí, llegan al mismo tiempo a la salida, pero ninguno se da cuenta de que el otro es su amigo, al que ha saludado hace un rato. Uno de ellos hace uso de la ''picaresca española'' y se cuela por delante del otro de una forma que bien podría haber ocasionado daños al coche del que ha dado marcha atrás para no comerse al listillo. Las ventanillas de los coches se bajan y se dedican un recital de los más variopintos calificativos de la copla taquera española. Luego, uno se percata de que el otro es su amigo, pero eso da igual. Feliz 2007.
3 comentarios:
Hola querido, me alegro de tener un nuevo blog que visitar. No te he respondido en el mío porque el muy puñetero me da un error por no sé que historia y´puedo leer los comentarios, pero no responder. He echado una vista rápida por tus posts y veo que compartimos algunas cosas y discrepamos en otras, ¡guay!. Un saludo y buenas fiestas para tí también.
La historia es típica de España. Parece una escena cotidiana española: si no es amigo, pasamos por encima de él. xDDD
Estas cosas pasan. Siento haber estado algo perdido, es que entre las fiestas y la gripe brutal que tengo...estoy un poco alejado de los teclados.
Saludos!!!
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