7/10/10

Los demás

Es curiosa la gente que se cree que te va a tener cerca porque sí o porque un día fue así, como si eso no hubiera que ganárselo casi a diario. No sé enfocar mi relación con esas personas, no sé si se comportan así ''a ver si cuela'' o están convencidos de que son algún tipo de pieza fundamental para los demás. La única pieza fundamental para uno mismo es uno mismo y todo tipo de relación social deriva de creer en uno mismo. Yo tengo al lado a tal o cual persona porque creo en mí mismo, en mis elecciones; es como coger confianza en uno mismo y canalizarla hacia los demás, todo funciona porque el núcleo de las relaciones es la forma de hacer las cosas que tenemos y cada persona que aparece me hace enfocarme desde una perspectiva distinta y ver hasta dónde creo en mí, cómo creo en mí y por qué creo o no en mí con esa persona. Por eso conmigo las cosas son como son y nunca te llevarás chascos como el de enterarte de que la chica que se te insinúa también lo hace con otro y con otro para garantizarse no sentirse sola o sentirse especial... y por eso nunca estará cerca una persona que pierda el tiempo o que se traicione a sí misma a base de excusarse o engañarse para vivir de forma distinta a la que se aparece en sus sueños. Yo no creo en eso, de ahí que no crea en ellos. Sí, todo va de creer o no hacerlo, ya no hay relaciones intrascendentes de ningún tipo con personas que no me aportan nada o casi nada. Hacía tiempo que quería borrar eso de mi vida, ese tener que hablar con gente y aguantar al personal porque sí y hablar de cosas que me dan igual; yo no regalo mi tiempo ni mi compañía y quienes quieran algo de eso se lo tendrán que ganar. He aprendido no solo que creer en uno mismo es el motivo de cualquier relación personal, también he aprendido a apreciar la honestidad y la sinceridad por encima de todo, a no tomarle el pelo a nadie, a no hacer perder el tiempo a la gente y a hacer de la libertad mi brújula... y a exigirle a los demás todo esto también si quieren tener algo que ver conmigo. Creer en alguien no son palabras que se dicen a la ligera, lo único que puedo hacer es pedirles ésto, que es lo mínimo de aquello que me pido a mí.

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