1/7/09

El último poema



He soñado tanto contigo
que ya no eres real.
¿Queda aún tiempo para que toque
tu cuerpo respirando,
besar tu boca
y hacer que tu voz vuelva a la vida?
He soñado tanto contigo
que ya no me queda tiempo para despertar.
He soñado tanto contigo,
he andado tanto, he hablado tanto,
he dormido tanto con tu fantasma,
lo único que me queda
es convertirme en un fantasma entre fantasmas,
una sombra cien veces más sombría
que la sombra que mueve y sigue moviéndose
brillante, sobre el reloj de sol de tus ojos.






Cierra tus ojos

Cierra tus ojos y mírame,
cierra la puerta y serás libre,
los sueños pueden ser realidad
si vives tu sueño conmigo.
Dile adiós a lo que eres,
lo que quieres no está tan lejos,
la vida es corta y la vida es larga
si me dejas cantar esta canción.
Regálame tus ojos,
te enseñaré cosas que no podías ver,
la lluvia caerá, el sol brillará
si nos tenemos el uno al otro.
Encontrarás aquello que no pudiste ser
si paras y me miras.






El calor de la palabra

Las campanas doblan sin razón y nosotros también,
nos regocijamos en el ruido de cadenas
que sonará dentro de nosotros con las campanas.
¿Qué es este lenguaje que nos azota mientras nos tropezamos con la luz?
Nuestros nervios son látigos en las manos del tiempo
y la duda llega con un aleteo solitario e incoloro.

Las campanas doblan sin razón y nosotros también,
el río que se llevó el agua ha dejado su lecho vacío
como los hilos de miradas furtivas que lamento
al pie de las paredes, lamiendo vidas en bares,
tentando a los débiles, secando el éxtasis,
excavando hasta las profundidades de viejas posibilidades.
El río que se llevó el agua ha dejado su lecho tan vacío
que incluso la luz se desliza en la ola tranquila
y cae hasta el fondo con un fuerte chasqueo de piedras.

Las campanas doblan sin razón y nosotros también,
las preocupaciones que llevamos son la ropa de nuestras almas,
nos las ponemos cada mañana
desabrochadas por las soñolientas manos de la noche.

Las campanas doblan sin razón y nosotros también,
nos iremos con quienes se van y llegaremos con quienes llegan,
vamos con quienes llegan, lleguemos cuando los demás se vayan.
Los colores pierden peso pensando,
pensando o llorando o quedándose o comiendo
frutas como la luz flotando en el humo,
pensando en el calor que mueve a la palabra
alrededor de su semilla, el sueño nos llamó.

Las campanas doblan sin razón y nosotros también,
andamos para escapar de las carreteras abarrotadas.
Una sola enfermedad extiende nuestra muerte,
sé que llevo la canción en mí y no tengo miedo,
llevo la muerte y si muero será la muerte
quien me llevará en sus brazos invisibles.

Las campanas doblan sin razón y nosotros también,
¿por qué buscar el final de la cadena que nos ata a la cadena?
Las campanas doblan sin razón y nosotros también,
haremos que los cristales rotos suenen en nosotros.
El oscuro aliento de la noche se afina
y por mis venas cantan flautas de marineros,
pienso en el calor que mueve a la palabra
alrededor de su semilla.
El sueño nos llamó.





El amante

Ella está de pie en mis ojos
y su pelo en el mío,
ella es la forma de mis manos
y el color de mis ojos.
Ella, tragada por mi sombra,
como una piedra contra el cielo.
Sus ojos siempre están abiertos
y no me deja dormir.
A la luz del día sus sueños
hacen que el sol se evapore.
Hazme reír, llorar y reír,
habla cuando no tenga nada que decir.





En la cuerda floja

Estirado como un cable fino,
andando por el hueso y el tendón,
bailo fuera de mi cuerpo
y nado fuera de mis lágrimas.
Sufre conmigo, derrúmbate conmigo,
despégame la piel y escálala,
encadéname a tu bolsillo y déjame pender a tu lado,
lléname de respuestas, cólmame de orgullo.
Contamina tu interior con mi imagen
y hazle el amor a mi sombra.
Arrástrate por mi aliento
deslizándose por tus venas,
trágame y déjame dentro de ti,
así podré destrozar tu cuerpo por dentro
y dormir en tu corazón,
así me quedaré ahí hasta que la muerte nos separe.
Sufre conmigo, derrúmbate conmigo...




Tú me admiras porque callo y miro al cielo,
porque no me ves llorar
y te sientes cada día más pequeño
y esquivas mi mirada en tu mirar.

Tómame o déjame
y si vuelves trae contigo la verdad,
trae erguida la mirada,
trae contigo a mi rival,
si es mejor que yo, podré entonces llorar.


Menuda infancia.


Liberarme de responsabilidades me ha cargado las pilas de una forma que no podía imaginar. Ahora mismo todo es puro, es genial, es feliz. La calle es feliz, la gente es feliz aunque no lo sospecha, todo transmite una energía que me hace respirar hondo, tranquilo, y disfrutar. Quiero ir a mil sitios y hacer un millón de cosas, me siento capaz de todo, tengo fuerzas para cansar al incansable perseguidor del fugitivo escolar, puedo notarlo, ahora mismo soy imparablemente feliz, por fin libre.



La verdadera noticia

El periódico Hoy en su edición del jueves contiene un artículo co-escrito por mí. Eric está haciendo ''prácticas'' en la sección local del periódico y le encargaron un artículo sobre las rebajas. Cuando me lo comentó se me acercó y me dijo ''échame una mano, que tú para esto de escribir controlas cuarenta veces mejor que yo'' y yo acepté, claro, primero por hacerle un favor gratuito, segundo por pasar un buen rato (ha sido genial) y tercero porque creo que esto me ayudará no solo a no oxidarme, sino también a escribir cuarenta veces mejor que yo. Fuimos a las tiendas de la plaza de los Alféreces a preguntar a dependientes y clientes. Uno de los dueños era el presidente de la Asociación de Comerciantes de Santa Marina, un barrio vecino al mío, ellos me dieron un premio por un concurso literario hace un par de años. Este tipo se manifestó en desacuerdo con la propuesta de la Unión de Consumidores de Extremadura de adelantar las rebajas o que incluso cada comercio las pusiera cuándo y cómo quisiera las veces que quisiera argumentando que eso favorecía a las grandes superficies. Le dije a Eric que fuéramos al Corte Inglés con la opinión del Presidente de la Asociación de Comerciantes y le preguntáramos al director su opinión al respecto. Era la jugada, ahí teníamos la noticia: estaba claro que el director del Corte Inglés se manifestaría a favor de la proposición porque el presidente tenía razón y allí se desencadenaría la confrontación entre el representante de la monstruosa máquina explotadora alienante y el representante de los pequeños comercios de la zona que cada vez ven menos dinero gracias a la presencia del Corte Inglés. El director esquivó el asunto manifestándose en contra de la proposición de la UCE, yéndose por los cerros de Úbeda: ''yo prefiero que las cosas sigan como están y que los períodos de rebajas sean dos e inamovibles''. Acto seguido nos invitó a un café que rechazamos por estar de servicio y por la incomodidad que provoca saber que creen que es fácil chulearte e intentarlo con tanto descaro. El hombre no se quiso mojar, pero leer entre líneas era ver su verdadera posición. Nos reventó la noticia. Fuimos a mi casa y escribimos el boceto del artículo. Quedo con Eric por la noche y me da el resultado final: una página con la fecha del día siguiente y un artículo que la cubre casi por completo. Lo mejor, lo más increíble, es que es en la PÁGINA 6!!!! Mi primera aportación a un periódico en mejor posición que la primera página incluso, es que es imposible que sea una coincidencia. Lo peor: la torcuata, así llamo yo a la censura del Hoy. Resulta que el Corte Inglés pone pasta en el periódico, 3000 euros o así al mes y ese factor politiza la cosa hasta el punto de que el redactor ha cogido el esbozo y lo ha convertido en una lamida de culo vergonzosa en la que se favorece al Corte Inglés y se desfavorece a los pequeños comercios… como si no tuvieran ya bastante con lo que tienen. El artículo no se libra de fotos a los carteles de rebajas del Corte Inglés y hasta mencionan la sonrisa de Carlos Baute. Me avergoncé de haber tenido que ver con eso, me sentí sucio… cuando lo leí fue como si me hubieran tirado al suelo, me hubieran puesto un colchón encima, hubieran puesto a mi madre encima del colchón y la hubieran violado conmigo allí debajo, incapaz de hacer nada por evitar la situación. La sonrisa de Carlos Baute. Me cago en sus putos muertos, así de claro. Me fastidia que la prensa española sea una marioneta cateta y cornuda y no una titiritera en sí misma. Aquí es una veleta política que no tiene conciencia de que es el cuarto poder, no como en los USA. Allí la prensa es un ente autónomo, una especie de partido político propio que viene a criticarlo todo a base de soltar los hechos tal cual son... pero bueno, Spain is different.

Y aquí está, el día que me descuartizaron tímidamente.

Lo más dulce: Eric me dijo que le diera ideas sobre cosas que pasan en la ciudad que pudieran interesar en redacción y yo le dije que les hablara de visitas guiadas gratuitas a sitios como la Torre de Espantaperros o Puerta de Palmas. En la misma página 6, escriben esto.

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